Quien espera no siempre desespera…
Y es de agradecer a quien sabe esperar
la paciencia con la que aguarda hasta que llega su momento.
Un valor que está en peligro de extinción,
en estos días en los que si no te pillo aquí y ahora….
me olvido...me voy...
Laida,
gracias por tu paciencia y gracias por tu apoyo e ilusión.
Laida
Casimira
Helene
Mariona